La Escuela Rural Nº 5 del departamento de Flores tiene el privilegio de llevar el nombre del Maestro Agustín Ferreiro.
Visitando este centro docente, a poco de conocer su funcionamiento, dialogar con su Directora e interiorizarnos en el trabajo que desarrolla, vienen a nuestra memoria páginas inolvidables del Maestro Ferreiro que pese a tener muchos años de escritas siguen siendo totalmente válidas en el presente.
Leemos en la primera edición de La Enseñanza Primaria en el Medio Rural, impresa en los Talleres Gráficos “La Artística” del departamento de Durazno donde el autor ocupaba la Inspección Departamental de Escuelas: …”Considero que el maestro siempre llevará sobre sus hombros, sean cual sean los planes, los programas, los medios y los fines, toda la responsabilidad en materia de la educación del niño. Sin él no habrá nada y no será nada si el maestro pierde la conciencia de su propia capacidad”.
Dirigir un Internado escolar es todo un desafío, hacerlo en el campo a cinco kilómetros de la ciudad es un desafío aún mayor.
Los docentes de la Escuela Rural Nº 5 del departamento de Flores han encarado este reto con total responsabilidad y sin duda, con plena “conciencia de su capacidad”. Esto lo avalan los hechos.
El proyecto de trabajo que se lleva adelante en este establecimiento docente tiene un rumbo claro: “Aprendo habilidades para la vida en un entorno saludable”.
Cada palabra que compone esta sentencia está cargada de contenido e implica serios compromisos en el área educativa.
Todos ellos se están cumpliendo gracias a la responsabilidad y entrega de los docentes que llevan adelante este proyecto. Durante las 24 horas que los alumnos permanecen en el Internado adquieren conocimientos en el área curricular, vinculando el trabajo con las actividades de granja en la medida de lo posible; aprenden informática y son evaluados en línea con las limitaciones que presenta la conectividad; adiestran sus manos; practican deportes; juegan y conviven en un medio que les enriquece por la práctica constante de valores.
Llegar y retirarse de la Escuela implica para estos niños otro aprendizaje. Aquí no hay una camioneta que los espere y los lleve a sus hogares, aquí no hay un corto trayecto a realizar, aquí hay horarios a respetar, ómnibus a esperar, kilómetros a recorrer…
Al presente en la Escuela trabaja una maestra francesa, la educacionista Catherine Rothenburger, que forma parte de un programa de intercambio docente en el que participan maestros de países europeos y de dos países de Latinoamérica: Chile y Uruguay. Las actividades que desarrolla esta docente francesa enriquecen el trabajo curricular y amplían el horizonte cultural de los niños.
El Internado Rural de Flores constituye una experiencia riquísima que podría ser aplicable en otras zonas del medio rural uruguayo siempre que se cuente con docentes comprometidos con su misión y “conscientes de su propia capacidad” como lo propugnaba el Maestro Agustín Ferreiro.
Directora del Internado Rural Sra. Mirtha Cabrera Chiazzaro junto a la Maestra francesa Sra Catherine Rothenburger